Seamos claros. Después de esos meses encerrados, limitados y agobiados, necesitamos salir. Abrir los brazos, gritar y sacar lo que se ha quedado dentro.
Y si somos sinceros, notamos que también nos vendría bien distanciarnos, no sólo socialmente como mandan, si no también de aquellos con los que hemos estado este tiempo conviviendo tan estrechamente…
Casados, solteros, emparejados, maridos, mujeres, jóvenes, maduros, hijos, padres, tíos, novios, novias... y un largo etc sentimos necesitar un respiro, pasar unos días SEPARADOS de esas personas con las que hemos estado tan cerca, precisamente PARA PODER SEGUIR UNIDOS, con las pilas bien recargadas.
Este año tan atípico, por nuestra propia salud mental, el cuerpo nos pide unas vacaciones diferentes. DESCONECTAR de verdad y de todo para reconectar con nosotros mismos.
Viajar, tomar unos días de descanso y desconexión, cambiar de aires y salir de casa es, hoy más que nunca, más que un placer, una necesidad.
Y precisamente ahora, hacerlo sol@s, despegándonos unos días de aquellos con los que hemos estado confinados… ¡¡es más bueno, saludable y necesario que nunca!!
No, no eres extraño, por pensar así.
Simplemente eres normal y tremendamente sano.
Pues sí, amigos, parece que el 2020 rarito ha venido para cambiar cosas en nuestra vida, pero, ya que aquí somos positivos… ¡Vamos a aprovechar lo bueno que tienen!.
En ViajarSolo no hacemos sólo Internacional; si eres asiduo a nuestra web, sabrás que son habituales en nuestra parrilla de viajes muchos, variados e interesantes programas por España.
Sin duda vivimos en un país increíblemente rico de posibilidades, así que ahora simplemente estamos reforzando y ampliando para que todos tengamos nuestro lugar de vacaciones tan merecido como necesario.
¿De qué eres más tú?
O quizá ¿qué te apetece más ahora?
¿Ya empiezas a soñar con tu cambio de aires?
¡¡VAMOS!!!
Y hablando de Dragones… a los que hoy nos enfrentamos no lanzan fuego, pero sí nos hacen sacar humo…
Esos seres mitológicos que en los tiempos antiguos aterrorizaban a las aldeas, se enfrentaban a los valientes y amenazaban a los niños antes de dormir, persisten en nuestra imaginería fantástica, aún sabiendo que no son reales. Sin embargo, en 2020 y más que nunca, seguimos teniendo dragones contra los que defendernos. No sacan llamas por la boca, no rugen y no aparecen de las sombras como gigantes, pero debemos enfrentarnos a ellos.