Aventura en Andalucía y los viajes activos

¿No os ha pasado nunca que teníais mil ganas de hacer un viaje pero como tenía actividad os echaba un poco para atrás? Precisamente eso me pasaba a mí con el viaje Aventura en Andalucía.

Os pongo en situación: el marco, incomparable (Huelva y sus maravillas naturales), la playa, el sol, la comida, la “cruzcampo”… pero entre tanto atractivo, bicicleta por el Algarve portugués, senderismo en Doñana, kayak por las marismas de Isla Cristina o trekking por la Sierra de Aracena. La navegación en velero no la cuento, porque eso nos apetece a cualquiera.

Llevo ya un tiempo vendiendo viajes y, como en una pastelería, no hay nada como probar el producto para saber lo que vendes. Por supuesto, no es lo mismo, en un caso ganas experiencias y en el otro kilos (sigo manteniendo que todo lo digo con conocimiento de causa).

Pues bien, llegaba el momento de probar el producto. Después de mucho tiempo intentando irme para el sur, este mes nos pudimos organizar entre todos y ya no pude dar marcha atrás. A los nervios previos a cualquier viaje (hay que hacer la maleta bien, no dejarnos nada en casa, poco tiempo para hacerlo…) añadía mis temores de no saber si iba a ser capaz de poder hacer un viaje de esas características.

En todo momento me avisaban de que era un viaje apto para cualquiera al que le guste la actividad al aire libre y sea mínimamente activo. Pero es que mi nivel de “mínimamente activa” es muy mínimo, minúsculo, diría yo.  Y si además de todo eso, sumamos el hecho de pensar que por tu inactividad puedes retrasar a todo un grupo o ralentizar la operativa del viaje… pufff, se me hacía cuesta arriba! Pero no hay nada como la sensación de que te enfrentas a algo distinto para que tu cerebro te diga “nena, tú puedes”.

No os voy a contar el viaje, porque para eso os tenéis que apuntar y vivirlo personalmente. Sólamente os digo que se puede, que no frenas ni retrasas al grupo, que no hay que correr para hacer las actividades, sino que lo bonito de ellas es hacerlas despacito, saboreando los paisajes, paladeando cada momento que vives en el destino y del que sabes que nunca lo vas a olvidar.

Señores, nuestros viajes no son una carrera, ni un concurso para ver quién es más rápido o quién puede más, sino que son formas de descubrir distintos destinos, localidades, pueblos y entornos naturales de los que de otra manera, no lo podrías hacer. Y, por supuesto, un equipo absolutamente profesional, siempre pendiente de ti, de si te encuentras bien, de adaptar todas las actividades a tu nivel físico. Vamos, una experiencia totalmente REPETIBLE!!!!

Así que, y acabando ya este post, eres un@ de los míos… mueve el cucu y ya verás cómo hay más vida al otro lado de la ventana 😉